La semana pasada acabé con un procesador de alimentos en el carro cuando fui a comprar el pan. No me preguntes por qué. Cuando llegué a casa había que estrenarlo a lo grande, y probar la potencia de la nueva adquisición. La crema de cacahuete es fácil de encontrar en cualquier supermercado, así que decidí ir un paso más allá y hacer esta deliciosa crema de avellanas.
Es perfecta para untar sobre el pan, acompañar a la avena en el desayuno o añadirla a tus batidos para darles un toque extra de sabor y energía. Además es fácil de hacer, lo único que requiere es paciencia, el procesador de alimentos se encarga del resto!

Si te animas a probar… ahí va la receta!
¿Qué necesitas?

• 1 y 1/2 tazas de avellanas tostadas sin sal
• 1 cucharada de aceite de coco
• 2 cucharadas de miel
• sal al gusto

¿Cómo se hace?

1. Introducir las avellanas en el procesador de alimentos y batir durante aprox. 10-15 min. Ir haciendo pausas para recoger los bordes y asegurarse de que se mezcle todo bien.
2. Cuando estén las avellanas bien trituradas añadir el aceite de coco, la miel y una pizca de sal. Batir durante 5 minutos más hasta que quede todo bien integrado en una pasta.
3. Verter en un recipiente de cristal con tapa para que se conserve mejor.

¿Algún truco?

Paciencia!! esa es mi recomendación para esta receta. Hay que esperar hasta que las avellanas empiecen a soltar su propio aceite para que se haga una pasta fina que se pueda untar.

Espero que os guste tanto como a mi! 🙂

Ma.