A menudo me ocurre, más en verano, sobre todo cuando voy por la calle y parece que todo el mundo lleve uno en la mano. Aquellos que poseen uno parecen más felices, con caras sonrientes y de placer absoluto. Las ganas de comer helado es algo que no se sacia fácilmente con cualquier otro sustituto, es por eso que decidí buscar la alternativa saludable. Sin azúcar ni lactosa ni aditivos ilegibles pero igual de cremoso e irresistible. Simplemente plátano. Plátano congelado, esa es la clave!

¿Qué se necesita?

• 3 Plátanos congelados
• 2 cucharadas de leche vegetal (de almendras, de arroz o de avena)
• Virutas de chocolate

¿Cómo se hace?

1. Verter los plátanos en el vaso de la batidora con la leche
2. Batir y decorar
3. Disfrutar!

¿Algún truco?

Para congelar los plátanos es preferible pelarlos y trocearlos previamente, la batidora te lo agradecerá 😉

Ma.